El momento del parto es una situación de bastante incertidumbre e incluso estresante, sobre todo en las nulíparas. Es por ello que, en Fisioterapia Hispanidad, os enseñamos a conocer cada fase del parto y cómo afrontarla, sintiéndonos en todo momento acompañadas. En esta ocasión, vamos a hablar de las posturas facilitadoras del parto y de su importancia.
¿Por qué son importantes las posturas facilitadoras?
El parto es movimiento y por ello es importante no quedarse quieta y tumbada. Hay que moverse e ir cambiando de postura.
La función de estas posturas será diferente según la fase del parto (aliviar el dolor, favorecer el descenso del bebé por el canal del parto,..). Todas las sensaciones cambian a medida que el bebé va descendiendo y avanzando, por lo que debemos escuchar lo que nuestro cuerpo pide, siendo probable que la postura que nos viene bien al principio del parto no nos dé resultados más tarde.
¿Qué notaremos en las diferentes fases?
Comenzaremos la fase de dilatación con movimientos pélvicos, por lo que la pelota de pilates va a ser nuestro gran aliado, aunque también se puede trabajar sin ella. Utilizaremos cualquier posición que hayamos aprendido durante los talleres realizados en la clínica en Fuengirola o que a vosotras os resulte agradable.
Para la movilidad pélvica podemos trabajar con básculas laterales, anteversión, retroversión, circunducciones…manteniendo siempre la autoelongación. Podemos hacer partícipe del proceso a nuestro acompañante permitiéndole ayudarnos en los movimientos.
A medida que aumenta la frecuencia e intensidad de las contracciones, nuestro cuerpo busca abrir aún más el espacio, necesitando movimientos más amplios. Durante este momento quizás te apetezca una postura de mayor elongación agarrándote a su cuello.
Aunque cada embarazada buscará la posición más cómoda para ella (de pie, sentada, tumbada, de cuclillas…), las posturas en cuadrupedia suelen ser muy bien toleradas. Te van a ayudar mucho a notar alivio, ya que disminuye la presión sobre el sacro. En esta postura, tu pareja puede servirte de mucha ayuda, ejerciendo presiones anteriores y caudales en el sacro para aliviar el dolor, masajeando la zona lumbar o haciendo tracciones.
Cabe destacar, como ya hemos comentado, que nos pongamos en la posición que nos pongamos, hay que mantener siempre la elongación del raquis.
El gran beneficio es que el alivio del dolor en el parto comienza con un trabajo previo durante el embarazo, ya que nos tenemos que preparar física, mental y emocionalmente para abordarlo. Conocer y practicar estas posturas durante el embarazo va a hacer que el día del parto nos salga de manera natural y tengamos más recursos a la hora de buscar la postura facilitadora más adecuada en cada momento.
Sigue nuestro pilates de embarazadas, ahí cada mes enseñamos nuestros talleres teóricos -prácticos además del asesoramiento de nuestra fisioterapeuta del suelo pélvico.
